El coreógrafo sueco se acerca a la cultura cubana a través de la Rumba, género medular de nuestra música tradicional. La partitura de Leo Brouwer, uno de los compositores más importantes de Cuba, es el punto de partida que Lidberg y Stefan Levin desarrollan para crear una celebración de juventud entre crepúsculos y amaneceres.
Se utiliza como escenografía la instalación Vientos (2017) de la artista visual cubana Elizabet Cerviño.
Estreno absoluto de Acosta Danza el 6 de abril de 2018 en el Gran Teatro de La Habana ‘Alicia Alonso’.